Job Description
Gestionar las actividades de la organización estableciendo tareas, objetivos y prioridades:
Crear un plan de acción detallado proyectando los pasos a seguir y organizándolos en un orden lógico.
Determinar los objetivos de la organización y definir las maneras de lograrlos.
Establecer criterios específicos en relación con la toma de decisiones y la resolución de conflictos.
Difundir la misión y visión de la empresa a los empleados.
Desarrollar, implementar, coordinar, revisar, evaluar y mejorar los procedimientos y políticas de la empresa, además de las actividades e iniciativas:
Desarrollar, aprobar e implementar procesos, programas y otras campañas internas para la empresa.
Gestionar la correcta distribución de recursos, asegurando que la correcta cantidad de responsabilidades sea asignada a las personas correspondientes en los departamentos correspondientes.
Ofrecer orientación y delegar su autoridad en caso de ser necesario.
Monitorear y supervisar el progreso de proyectos, objetivos y costos de acuerdo con los presupuestos y plazos de tiempo establecidos:
Identificar problemas y deficiencias, asegurando que se tomen todas las medidas necesarias para que se corrijan.
Llevar el control de los presupuestos, colaborar con socios e inversionistas y con los departamentos de Ventas, Finanzas y Contabilidad para discutir estrategias y así poder alcanzar todos los objetivos económicos de la empresa:
Revisar e interpretar la información presupuestaria y los datos financieros.
Monitorear los gastos y realizar un análisis de rentabilidad.
Evaluar y manejar cualquier riesgo financiero.
Asegurar que los libros contables y otros controles cumplan con la normativa vigente.
Supervisar el desempeño de los integrantes de cada departamento, autorizar y gestionar la creación de otros departamentos y las posiciones asociadas con ellos:
Elegir a personas para cubrir los puestos de Gerente y demás puestos ejecutivos.
Entrenar, supervisar y dirigir a un grupo de empleados o instruir al departamento de Recursos Humanos para que lo haga.
Establecer criterios y estándares para la evaluación, reclutamiento y ascenso del personal.
Monitorear el desempeño del personal, redactar reportes y actualizar los registros cuando sea necesario.
Establecer horarios de trabajo.
Cultivar relaciones laborales con empleados y terceros:
Motivar, inspirar y comunicarse con los empleados.
Ganar confianza, adquirir influencia y credibilidad dentro de la organización para cultivar y mantener buenas relaciones laborales.
Colaborar con otras empresas y con terceros.
Representar a la empresa o delegar a otra persona para que actúe en su nombre durante negociaciones, eventos corporativos, actividades de Relaciones Públicas y otros eventos oficiales.
Supervisar la organización y coordinación de eventos corporativos internos y externos, incluyendo eventos promocionales.
Supervisar que se lleve a cabo el mantenimiento de equipos de oficina.
Programar inspecciones, mantenimiento, reparaciones y renovaciones periódicas.
Solucionar conflictos en cuanto ocurran para asegurar el buen funcionamiento de la organización:
Asesorar al departamento de Recursos Humanos sobre cómo tratar quejas y requerimientos, participando durante la resolución de conflictos cuando sea necesario.
Labores diarias
Planificar, organizar, dirigir y evaluar las actividades de la empresa, asegurando el cumplimiento de objetivos y metas.
Monitorear presupuestos y el progreso de los distintos proyectos y actividades.
Desarrollar, implementar y actualizar procesos y políticas.
Supervisar a los empleados, encargarse de su entrenamiento, gerencia y evaluaciones.
Cooperar con empleados, otras compañías, socios y terceros, representando a la empresa o delegando estas responsabilidades a otra persona.
Perfil del candidato
Habilidades de comunicación, negociación y proactividad:
Comunicarse claramente, tanto de manera escrita como oral, para dar instrucciones explícitas y crear un ambiente laboral transparente y comunicativo con los empleados de la empresa.
Cultivar y mantener relaciones laborales a largo plazo para facilitar el trabajo y la colaboración entre empresas.
Saber escuchar a los demás, tratar a otras personas con respeto y mantenerse calmado durante situaciones adversas.
Gestionar requerimientos de manera educada, profesional y efectiva.
Ser capaz de dar y recibir críticas y de reconocer el buen trabajo de sus empleados.
Excelentes habilidades empresariales y capacidad de liderazgo:
Ser capaz de liderar y supervisar un equipo multidisciplinario.
Motivar a otros a alcanzar objetivos y a exceder las expectativas.
Ser capaz de delegar responsabilidades y autoridad a otros para asegurar el buen funcionamiento de las operaciones.
Ser ingenioso, enérgico y optimista.
Organizado y capaz de manejar su tiempo efectivamente:
Ser organizado y detallista, priorizando actividades y manejando el tiempo de manera eficaz.
Ser capaz de supervisar y coordinar múltiples departamentos al mismo tiempo y de trabajar bajo presión en un entorno dinámico y activo.
Trabajar de manera independiente y sin supervisión.
Capacidad analítica y para tomar decisiones, habilidad para resolver conflictos:
Resolver conflictos de manera eficiente y rápida.
Ser creativo y utilizar su imaginación para desarrollar nuevas ideas y encontrar nuevas soluciones a los problemas.
Demostrar buen juicio y pensar de manera estratégica.
Flexible y sensible con capacidad de adaptarse a distintas situaciones.
Confiable y leal.
Conocimientos técnicos sobre computadoras:
Ser capaz de procesar textos, utilizar hojas de cálculo y, especialmente, manejar bases de datos y el programa informático de Planificación Institucional de Recursos (ERP).
Tener buena presencia.
Obtener un postgrado en Administración y Dirección de Empresas (MBA) es la opción más popular entre los Directores Generales; sin embargo, haber obtenido un título en Finanzas, Contabilidad, Economía, Gerencia de Operaciones, Gerencia de Eventos, Turismo, Hotelería, Hospitalidad, Derecho, Salud, Educación, Ingeniería, Telecomunicaciones o Lenguas Modernas puede llevarlos a especializarse en el área de su elección y les dará una ventaja sobre otros candidatos.
Tener competencias a nivel avanzado de una lengua extrajera, sobre todo inglés o francés, es altamente valorado para ocupar este puesto.
Por otro lado, algunos candidatos que aspiran llegar a ser Directores Generales deciden hacerlo de manera tradicional y ascender hasta lograrlo, empezando con un empleo administrativo a nivel principiante en la empresa. Esto probablemente tomaría mucho más tiempo y se ha convertido en una práctica anticuada ya que cada vez más personas deciden especializarse y obtener un título universitario.
Dependiendo del área de especialización y del tipo de organización, un Director General deberá tener entre 5 y 7 años de experiencia como Gerente y entre 8 y 15 años de experiencia planificando, desarrollando y gestionando proyectos. Candidatos con un postgrado requerirán de menos años de experiencia en el área, entre 6 y 10. Además, haber trabajado con servicios financieros, realizando análisis financieros y calculando riesgos, lo convertirá en el candidato perfecto.
La evolución profesional de un Director General dependerá de su desempeño, experiencia laboral, especialización y logros académicos y profesionales. Una vez hayan adquirido suficiente experiencia en un área, los Directores Generales pueden ascender a Consultores Administrativos, ofreciendo servicios de asesoría y consultoría a organizaciones como trabajador autónomo.